Luego de ese trabajo de la antigua Grecia, no dio la segunda parte del trabajo práctico, y nos dijo que no nos dejemos estar y que empecemos cuanto antes. En ese momento pensé con mi amiga de lo que me paso con el otro trabajo (que a ella le paso lo mismo) y dijimos que lo íbamos a empezar ese mismo día. Pero al instante pensé y dije muy relajada: No, mejor hoy no, mañana talvez empiezo.
martes, 4 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario